Los ejercicios de respiración que se hacen en una clase de yoga constituyen el Pranayama. En sánscrito, prana significa energía y jama significa control. Por lo tanto, es el control de la energía a través del control de la respiración. ¿Quieres aprender para qué sirve esto? Sigue leyendo o fórmate con nuestro Máster Monitor de Yoga.

¿Cuántos tipos de Pranayama hay?

Existen diferentes tipos de Pranayama y cada uno cuenta con diversas funciones. Entre ellas están las de purificar el cuerpo, aumentar el ritmo cardíaco, limpiar las vía respiratorias, ganar concentración, entre otras.

Los tres más conocidos son Kaphalabati (cráneo brillante), Anuloma Viloma (respiración alterna), y Ujjajo (respiración victoriosa). Además de ser de los más practicados, son de los más sencillos y por ello, son los que se enseñan primero a las personas que acaban de empezar.

Otros pranayamas son Nadhi Shodhana, Brahmari, y el Sama Vritti.

Beneficios del Pranayama

Estos ejercicios son también una práctica física que tienen efectos internos. Esto es así porque influyen en el sistema respiratorio, el circulatorio, el energético y el mental. Por ello, ofrecen diversos beneficios que a continuación te nombraremos.

Nivel físico

  • Favorecen la capacidad pulmonar e incrementan la capacidad respiratoria, contribuyendo así a una mayor oxigenación de la sangre y el organismo.
  • Eliminan los residuos de dióxido de carbono que generamos al exhalar, limpiando el sistema respiratorio.
  • Garantizan una correcta circulación de fluidos corporales en riñones, estómago, intestinos e hígado.
  • Limpian la sangre, y tonifican el corazón, el sistema nervioso y la médula espinal.
  • Proporciona vitalidad e incide físicamente en una función de masaje cerebral.

Pranayama para la energía

  • Purifica los canales por los que circula la energía y deshace los bloqueos
  • Equilibra la actividad de los canales principales
  • Armoniza, activa e incrementa el potencial de los chakras

Nivel mental