Estimular y relajar los músculos, reducir el dolor muscular, oxigenar la sangre o aumentar la temperatura de la piel son algunos de los beneficios de someterse a tratamientos de quiromasaje. Actualmente, se considera una técnica muy efectiva sobre todo para aquellas personas que incluyen el deporte en su rutina y quieren evitar lesiones. ¿Te interesa descubrir más sobre el quiromasaje? Sigue leyendo porque hoy te contamos qué es, cómo funciona una sesión y por qué estudiar quiromasaje puede ser una buena idea.

Estudia ahora el máster en quiromasaje y aprende las técnicas necesarias para realizar masajes manuales.

¿Qué es el quiromasaje?

El quiromasaje es una técnica que se aplica manualmente, sin utilizar ningún tipo de instrumento o dispositivo más allá de las manos del profesional.

Esta técnica consiste en realizar un conjunto de maniobras, llamadas pulsaciones, con el objetivo de amasar y golpear la superficie de la piel del paciente. Según el problema que se deba tratar, estas pulsaciones se aplicarán con una presión, fricción o vibración determinada. Este método sirve para manipular distintos tejidos de la piel con tal de aliviar los dolores que manifiesta la persona en cuestión.

Durante las sesiones, el profesional debe practicar dos conceptos básicos: la técnica y la sensibilidad. De esta manera, se asegura un trato profesional para que el paciente pueda recuperar el buen estado de su musculatura afectada de cualquier zona del cuerpo.

¿Cuál es la diferencia entre masaje y quiromasaje?

A pesar de que son dos técnicas muy similares, difieren en el modo de aplicación del masaje y del tratamiento que ofrecen a los pacientes. Veamos algunas de sus diferencias más destacables:

  • El quiromasaje es un tipo específico de masaje, una técnica con una finalidad muy clara: buscar el confort de los pacientes.
  • Las principales funciones del masaje son:
    • Ayudar a reducir el estrés.
    • Contribuir al mantenimiento de la flexibilidad de los músculos.
    • Aliviar problemas como dolores de cabeza, alergias, sinusitis…
  • En cambio, las principales funciones del quiromasaje son:
    • Combatir contracturas dolorosas para el paciente, dolores de cervicales, hombros, entre otros.
    • Eliminar dolores musculares y solucionar los problemas de circulación.
    • Ayuda a reducir y controlar la celulitis.

¿Qué te hace un quiromasajista?

Se denomina quiromasajista al profesional que realiza el masaje terapéutico. Es la persona que se encarga de realizar el masaje con la técnica adecuada para cada situación: para la espalda, el pie, el abdomen, el tórax, la cabeza y el rostro… A continuación, te contamos las principales funciones a realizar:

  • Técnicas para complementar tratamientos: son especialistas que, la mayoría de las veces, actúan para prevenir enfermedades y promover la mejora de la salud del paciente.
  • Mejorar las patologías: los quiromasajistas contribuyen a la mejora de ciertas patologías, como el asma.
  • Contribuir a reducir el estrés: mediante la relajación de los músculos y la reducción de tensiones, el paciente se sentirá alejado del estrés y aumentará su bienestar.

¿Qué cobra un quiromasajista?

Actualmente, el sueldo medio de un quiromasajista en España es de 1.700 € brutos al mes. Como en todas las profesiones, el sueldo depende de muchos factores, como la experiencia y el cargo que ocupa cada profesional. Por otro lado, si llegas a trabajar por tu cuenta, puede que recibas hasta 1.800 € brutos al mes en según qué centros. Se debe tener en cuenta que una sesión de quiromasaje dura aproximadamente una hora, por lo que el coste medio por sesión es de 40 €.

Matricúlate en el máster online en quiromasaje y desarrolla tus conocimientos y técnicas en aplicación de masajes.

¿Por qué estudiar quiromasaje?

Si tienes dudas sobre si estudiar quiromasaje es una buena opción, aquí te contamos una serie de razones que de seguro te convencerán para seguir tu sueño:

  1. Futuro laboral: el quiromasaje no es una moda, sino que la sociedad siempre va a necesitar de estos servicios. Por esto, una vez terminados los estudios, podrás disfrutar de numerosas salidas laborales en distintos centros: spas, a domicilio, centros deportivos, o incluso montar tu propio centro.
  2. Nunca trabajarás solo: si te gusta trabajar cerca de las personas, esta profesión nunca te tendrá parado. Te formarás para tratar a los clientes adecuadamente y comprenderlos.
  3. Estilo de vida saludable: ser quiromasajista no comporta tener una vida sedentaria y estar sentado toda la jornada laboral. Tú decidirás la pose que más te convenga para realizar la sesión, podrás estar de pie y sentarte cuando lo creas necesario.
  4. Horario flexible: si llegas a tener tu propio centro de quiromasaje, no tendrás que preocuparte por los horarios, ya que serás tu propio jefe. Podrás tratar a los pacientes según más te convenga y conseguirás tener un equilibrio entre tu vida laboral y persona.

¿Qué salidas laborales tiene estudiar quiromasaje?

La demanda para quiromasajistas crece, especialmente en centros deportivos y en clínicas de salud y bienestar. Además, estos últimos años también ha aumentado la demanda en consultas privadas y particulares. Así pues, estudiando quiromasaje en la Escuela Europea del Deporte, optarás a las siguientes salidas profesionales:

  • Centros de fisioterapia.
  • Spas y balnearios.
  • Centros deportivos o gimnasios.
  • Clínicas de rehabilitación.
  • Hospitales de osteopatía.