Si te gusta practicar alguna actividad física seguro sabrás que una nutrición deportiva adecuada es indispensable para tener un buen rendimiento. De poco te servirá entrenar duramente si no lo combinas con una correcta ingesta de comida. Dicha dieta tiene que ser equilibrada y energética. Igualmente, siempre deberá ir acorde a tus necesidades físicas, objetivos y al tipo de ejercicio que realices.

Un buen régimen alimenticio deportivo te permitirá mejorar tus marcas, ganar masa muscular, recuperarte más rápido tras el esfuerzo y mantenerte sano. Acudir con algún especialista es necesario para que te asesore en tu plan de nutrición y te ayude a cumplir estas metas. Pero si deseas empezar cuanto antes a mejorar tu rendimiento, los siguientes consejos te serán útiles para corregir tu plan dietético. O, si te interesa este tema y quieres convertirte en un experto en necesidades nutricionales en la actividad física, consulta nuestro Máster en Nutrición Deportiva + Máster en coaching nutricional.

Consejos para optimizar tu nutrición deportiva

La sana alimentación tiene que cubrir todos los ciclos del deporte: el descanso, la fase activa y la de recuperación. Si consumes el número de nutrientes suficientes día a día en función de estos ciclos podrás perfeccionar tu rendimiento físico. Algunos consejos que puedes tomar en cuenta para lograr ésto son:

Aliméntate de forma variada

Una nutrición deportiva diversa se basa en la pirámide nutricional. Esta incluye: carbohidratos (60% de la ingesta calórica para un deportista), grasas naturales (20%),  proteínas (15 a 20%), vitaminas, minerales y agua (70% del peso corporal).

Toma suficiente agua

Beber agua es la clave para que los nutrientes se adhieran correctamente a tu sistema. No te limites, escucha a tu cuerpo y toma más de lo que creas necesario. Esto dependerá de la intensidad del ejercicio y de las condiciones del clima. Recuerda que un músculo deshidratado es propenso a sufrir lesiones.

Consume alimentos frescos y naturales

El mejor ejemplo de esto son las frutas y verduras. Las ensaladas o licuados te aportarán los minerales, vitaminas, fibra y antioxidantes que no encontrarás en otros alimentos. Sin embargo, no pienses que es lo único que debes comer para perder grasa y estar fuerte. Son un complemento de las proteínas (carnes, huevos, pescados) y las grasas (aceites, frutos secos, pescados).

Fija una dieta de entrenamiento, competición y recuperación

Dieta de entrenamiento: Respeta tus horarios y distribuye tus comidas en cinco tomas. La comida fuerte la debes consumir tres horas antes del entreno.

Dieta de competición: si vas a realizar algún maratón o competencia de alto rendimiento, lleva el siguiente régimen tres días antes del evento. Debe ser alto en carbohidratos, bajo en grasas y en fibra. Consume más pescados que carne y evita las ensaladas crudas.

Dieta de recuperación: Toma frutas y líquidos durante los primeros 15 minutos tras la prueba. Después de dos horas, lo mejor es comer carbohidratos y tomar bebidas hidratantes.